6-RestMinisterial

El Lugar Ideal, para una Segunda Oportunidad.

Entendemos las angustias y frustraciones cuando el pecado ha destruido años de ministerio. Cada uno tiene una historia diferente, pero la magnitud de su pecado y su disposición a lidiar con él es un factor crucial para una restauración.

El asunto principal del fracaso moral en la vida de un ministro es que no solo afecta su vida personal, sino a su familia y a todos en su esfera de influencia. Es como un tsunami que llega a su vida, con gigantescas olas del dolor, vergüenza, rechazo; lo cual le puede llevar a la devastación de por vida.

Sin embargo, creemos que Dios es el sanador de vidas rotas. Él se deleita en restaurar a aquellos que parecen dañados sin posibilidad de reparación. Isaías 61:1, 3 capta la esencia de esto, y es el mismo pasaje que Jesús vuelve a citar en Lucas capítulo 4.

La Restauración es IDEA de Dios

David y otros personajes del Antiguo Testamento experimentaron la compasión y la gracia de Dios. De hecho, «el Señor es misericordioso y piadoso, lento para la ira y grande en misericordia» (Éxodo 34:6). Estamos convencidos de que Su compasión, gracia, misericordia y amor le guiarán y consolarán durante esta dolorosa temporada. En última instancia, Él puede usar la caída de un ministro para fortalecer y nutrir el cuerpo de Cristo.

En Salmos 51, David nos enseña como su error después se convirtió en medicina para que otros qué estaban alejados de Dios se convirtieran a Él.

Aproveche su Segunda Oportunidad

Quizá usted ha sido descalificado y piensa que ya no tiene ninguna oportunidad. Permítanos decirle que Dios ha elegido usar a seres humanos imperfectos para construir Su reino. Que caigan lo entristece, pero no lo toma por sorpresa. Pero debido a que Él es el Todopoderoso, puede tomar una situación devastadora y convertirla en gloria para Su nombre. Va a tomar tiempo, pero Dios no solo puede guiarle a través de ese proceso escabroso, sino que también puede convertirlo en medicina para otros.

Dios es de segundas oportunidades, y Mi Faro Online entendiendo esto, a través de La Gran Comisión Digital le brinda un espacio para que usted se restaure junto con su familia, y luego haga la obra del ministerio desde donde usted está, usando su experiencia para impactar vidas alrededor del mundo, a través de nuestros pasos 4. Servimos y 5. Vamos.

Tenemos un equipo especializado en el campo de la Restauración Ministerial que reúne ministros con años de experiencia profesional en el campo de la psicoterapia cristiana, y ministros que un día cayeron, pero se restauraron y hoy están aquí para entenderle y acompañarle en este proceso.

El Proceso

La restauración de un ministro caído depende de su capacidad para asumir la responsabilidad, y voluntariamente someterse a una autoridad espiritual y ministerial mediante un proceso que le brinde dirección, un plan estricto de seguimiento y rendición de cuentas en 27 áreas de su vida personal, familiar, social y espiritual, y la planificación de objetivos alcanzables. No es un proceso solitario, aprovechamos los beneficios terapéuticos de los grupos de apoyo homogéneos, donde todos los integrantes comparten la misma necesidad, y entonces se crea dentro del grupo una atmósfera sanadora producto de tres cosas indispensables en estos procesos: 1) La capacidad del que dirige el grupo, 2) la calidad del material que se usa, y 3) la disposición y el compromiso del participante.

Señales para la Restauración

La restauración solo es posible en un clima de arrepentimiento evidenciado por la sinceridad, la cooperación, y las siguientes señales indispensables:

  1. El ministro caído se ha arrepentido verdaderamente, y experimenta un dolor genuino por su pecado.
  2. Hay una renuncia decisiva al acto inmoral.
  3. Hay una actitud de no estar a la defensiva, es decir, no hay excusas, pero si hay humildad.
  4. Hay un espíritu desprovisto de orgullo, amargura y deseo de seguir ministrando por su cuenta.
  5. El cónyuge está dispuesto a perdonar y restaurar su matrimonio.
  6. Ha hecho un reconocimiento del pecado al cónyuge y a la familia.
  7. Ha hecho una confesión pública a la iglesia en la que el ministro ha servido.

Si usted cumple con las declaraciones anteriores, usted es candidato a ser parte de nuestro grupo de Restauración Ministerial.

Si se siente atrapado por la amargura y el resentimiento, le invitamos a comenzar hoy nuestro taller «El Poder Sanador del Perdón«.

Salmos 51:12-13

«Vuélveme el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente. Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se convertirán a ti«.

Su Próximo Paso

Inscribirse para comenzar su Restauración personal, familiar y ministerial.

 

Llene la aplicación pulsando abajo, y pronto se le notificará de su inscripción para que empiece su proceso restaurador.